Los Beatles con Brian Epstein
Decir que los Beatles dominaron la década de los 60s es como decir que el cielo es azul: un absoluto que nadie debe poner en duda. Fue en esta década donde los cuatro muchachos de Liverpool tomaron y conquistaron todo el mundo de la música, llevándolo a un paroxismo mediático nunca antes visto y que moldearía el futuro de millones de personas, aficionados y músicos por igual, por varias décadas.
Pero la dominación de los Beatles en los 60s, como todo gran imperio, fue hecha un ladrillo a la vez y un paso a la vez. Y hubieron dos factores esenciales que los llevaron a otro nivel tras la trayectoria del grupo como Quarrymen y en su primera gira como The Beatles: la llegada de Ringo Starr como baterista y de Brian Epstein, un hombre esencial para entender el éxito de este grupo, como manager.
A continuación vamos a cubrir el periodo más éxito de los Beatles en los 60s, cómo empezaron en aquellas noches de Hamburgo y la influencia de Epstein para que se convirtieran en la banda más exitosa de todos los tiempos.
Esos primeros años locos
“Terminó sucediendo que ellos eran la única banda que veía porque eran demasiado buenos, incluso para esos años.”
-Ringo Starr recordando cuando los Beatles abrían para su banda, Rory Storm and the Hurricanes.
Ringo siempre ha sido una figura interesante de analizar debido a su extensa trayectoria: es el Beatle que más se ha expandido con el paso de los años y cuya “marca” tal vez sea la más reconocida actualmente, solo detrás de John Lennon.
Mirando en retrospectiva, los obstáculos siempre estuvieron a la orden del día en la vida de Ringo.
Nacido como Richard Starkey, sus primeros años en las escuelas de Liverpool lo vieron siendo víctima de muchos tipos de enfermedades y malestares que complicaron sus estudios hasta el punto que se retrasó en avanzar a los siguientes niveles. Esto también tendría su lado positivo: le permitiría al futuro Ringo de los Beatles desarrollar un mayor interés en el mundo de la música.
Con solo diecisiete años de edad fundaría su primer grupo, Eddie Clayton Skiffle Group, en 1957, que se volvería un éxito menor en el área local de Liverpool al conseguir un par de conciertos importantes en la zona. No sería hasta el año entrante que Ringo comenzaría a desarrollar un afecto notable por el Rock & Roll y partió de este grupo debido a que quería explorar ese sendero musical.
Pronto Ringo, aun usando su nombre real de Richard Starkey, se uniría a Rory Storm and the Hurricanes, banda que conseguiría un éxito moderado a través del Reino Unido y que sería trasladado a Alemania, precisamente a Hamburgo. Aquí es cuando la historia de Ringo con los Beatles, más allá de un par de conciertos en giras conjuntas, comenzaría de verdad.
Los Beatles y su llegada a Alemania
“Mi modelo de negocios son los Beatles. Eran cuatro tipos que mantenían las tendencias negativas de cada uno bajo control. Balanceaban a cada uno y el resultado final era mayor que la suma de sus partes. Y así es como veo los negocios.”
-Steve Jobs.
Si bien es cierto que Ringo Starr había compartido un par de conciertos con los Beatles yendo de gira con Rory Storm and the Hurricanes por el Reino Unido, la realidad es que no llegaría a establecer vínculos con el grupo hasta que llegaran a verse las caras en Alemania, precisamente en Hamburgo.
Como se pueden imaginar, los Beatles en 1960 aún no eran los titanes del mundo de la música que se iban a volver: habían hecho un par de giras, con una sola siendo fuera de Inglaterra (en Escocia, para ser precisos). Por lo que su manager de ese entonces, Allan Williams, pensó que sería buena idea llevarlos a Hamburgo ya que otra de sus bandas, Derry and the Seniors, tuvieron mucho éxito por esos lares.
Lo interesante de la situación de los Beatles en ese momento es que no eran un cuarteto, sino un quinteto: la alineación actual incluía a John Lennon, Paul McCartney, George Harrison, Stuart Sutcliffe (una figura clave y trágica dentro de la historia de los Beatles, por como moriría dentro de unos años) y la posición del baterista que era cambiada cada cierto tiempo.
Conseguir un baterista estable para la banda fue una situación tan complicada que tuvieron que contratar a Pete Best, quien sería el último baterista del grupo antes de la llegada de Ringo, unos días antes de viajar a Alemania, sin un gran conocimiento de los temas a tocar y teniendo que aprenderlos sobre la marcha.
De todas maneras, los cinco muchachos de Liverpool comenzaron su travesía más allá del Reino Unido y el resto, como se suele decir, sería historia.
Brian Epstein, el hombre que cambió todo
“La verdad es que sólo estábamos esperando la oferta del primer gran hombre con un gran cigarro en la boca.”
-John Lennon muchos años después.
No se puede entender lo que fueron los Beatles sin la gestión e influencia de Brian Epstein detrás del escenario. Más allá de la música creada, éste fue el hombre que puso a los Beatles en el mapa, les enseñó el poder que tenía el marketing en el mundo de la música y mostró lo importante que es el negocio para entender por qué hay bandas que triunfas y otras que no, indiferentemente de la calidad de su trabajo.
Brian Epstein no era una figura rimbombante en el mundo de la música cuando conoció a los Beatles en una taberna en Liverpool en 1961; tal como ellos, estaba comenzando a dar sus primeros pasos en el negocio y quería trascender más allá de lo que se había establecido para él.
La música siempre fue parte de la vida de Epstein y su familia manejaba una pequeña tienda de discos que con el paso del tiempo le iba a pertenecer, pero tal como Paul y John, Brian quería más y decidió embarcarse en el negocio de la música. Si bien es cierto que el hombre de Liverpool ostentaba una apariencia elegante y que transmitía opulencia, el éxito aún no lo había encontrado, pero era un ferviente creyente de que había que mostrar clase a todo momento (él sería el que les diría a los Beatles que adoptaran su apariencia clásica de traje y que se cortaran el cabello).
Entre las muchas funciones que Epstein llegó a lograr con la banda, más allá de su manejo magistral de los asuntos internos de la banda y siempre mantener al público en vilo, fue el hecho de que consiguió un contrato con la disquera EMI y que pudieran trabajar en los estudios de Abbey Road. ¿Cuál fue el argumento de Brian para que Ed Sullivan, CEO de la empresa, les ofreciera un contrato? Muy simple:
“Son la mejor banda del mundo.”
Ahora suena fácil decir eso, pero a principios de los 60s casi nadie sabía qué iba a ser de esos cuatro chicos de Liverpool.
Epstein lo sabía y por eso decidió guiarlos.
El Ringo de los Beatles y tomando Hamburgo
“Bueno, prefiero morirme de hambre con una mejor banda. Y los Beatles eran una mejor banda.”
-Ringo cuando le preguntaron por qué dejó Rory Storm and the Hurricanes para unirse a los Beatles.
Debido a las constantes necesidades de los Beatles por tener un baterista durante sus meses y años en Hamburgo –Pete Best nunca terminó de cuajar en el seno de la banda, ni personal ni musicalmente hablando-, Ringo ocupó muchas veces la posición sin haber sido contratado de manera permanente, cosa que derivaba en que él no estuviera muy seguro de si querían sus servicios. Eventualmente Epstein le ofreció el puesto y aceptó de buen grado.
Fue en Hamburgo donde pasaron muchos eventos claves para lo que sería la futura “Beatlemania” y en donde comenzaron a mejorar sus habilidades como profesionales.
Uno de los eventos más importantes fue la amistad que la banda forjó con la artista Astrid Kirchherr, quien se volvería la compañera sentimental de Stuart Sutcliffe y con quien se casaría una vez que éste dejara la banda. Astrid también ayudó, junto con la impronta esencial de Epstein, a que la banda cambiara su imagen a una mucho más pulcra, con trajes y sus cortes de cabello clásico, formando una estética mucho más coherente y cohesiva.
Hamburgo era para ese entonces una de las ciudades que se encontraba más golpeada por la criminalidad y la inseguridad en Alemania; esto se mostraba especialmente en el barrio de St. Pauli, en donde los Beatles tocaron la gran mayoría de sus conciertos en Hamburgo y en donde comenzaron a curtirse y a ganar una cierta fama entre sus seguidores.
En las palabras del propio John Lennon: “Tal vez nací en Liverpool, pero crecí en Hamburgo.”
La alineación clásica estaba formada, el manager ideal estaba listo para guiarlos y estaban en una ciudad que abrazó su estilo innovador de Rock ‘N’ Roll.
La “Beatlemania” estaba por comenzar.
El primer álbum… no lo que se esperaba
“Las autoridades soviéticas pensaron en los Beatles como un arma de la Guerra Fría. Los chicos perdieron el interés por los ideales y dogmas inamovibles de los soviéticos, dejando de ver a alguien que hablara en inglés como un enemigo. Ahí fue cuando los comunistas perdieron dos generaciones de jóvenes. Fue un impacto increíble.”
-Dr Yury Pelyoshonok, profesor de estudios soviéticos.
Para las personas que no están familiarizadas con el mundo de la música en las décadas de los 50s y de los 60s, entender la cronología de álbumes y producciones hechas por los Beatles en sus comienzos puede llegar a ser un poco complejo, pero es una parte esencial para entender la progresión de la banda con el paso de los años.
Por ejemplo, hay muchos grupos que por esa época hacían las veces de banda de fondo para varios cantantes, complementando sus composiciones y yendo de gira, lo que fue el caso de los Beatles con el vocalista inglés Tony Sheridan en 1962.
My Bonnie es el primer álbum de estudio que cuenta con la impronta de los Beatles, refiriéndose en este caso como Tony Sheridan and the Beat Brothers. Ringo Starr estaba próximo a unirse a la banda –Pete Best estaba en la batería- y Stuart Sutcliffe aún estaba con ellos, por lo que aún no se había creado la alineación clásica como tal.
Fue durante esta época que firmaron un contrato de un año con Polydor Records para la grabación de este álbum antes de su icónico contrato con EMI. Los tanto Sheridan como los Beatles tenían un cierto reconocimiento en Hamburgo, donde se grabó el álbum, y My Bonnie alcanzó el puesto 32 en la Musikmarkt del país germano.
No sería hasta 1962 que firmarían con EMI, ya con Ringo en la banda y Stuart fuera de ella, y que comenzarían a grabar con el connotado productor George Martin en Abbey Road. Grabaron un par de singles que fueron un abrebocas, mientras que los cuatro miembros acordaban que todos compartirían las responsabilidades con el micrófono, para el fastidio de Ringo, quien nunca se vio a sí mismo como cantante.
Comienza la locura
“Si no fuera por los Beatles, no habría nadie como nosotros.”
-Jimmy Page.
Si contamos su etapa como Quarrymen, los Beatles se tardaron alrededor de siete años para poder sorprender al mundo en 1963 con su primer LP oficial y netamente de su autoría, Please Please Me.
El álbum fue un éxito instantáneo, lo que se convertiría en costumbre para el cuarteto de Liverpool. Lo que es fascinante es el hecho de que un álbum tan importante, tan exitoso y tan influyente fue grabado en un solo día. Para los estándares actuales, eso es casi inhumano, pero esto era una práctica que grupos como Led Zeppelin o Black Sabbath aplicarían en el futuro con sus grabaciones.
John Lennon luego diría que el álbum fue hecho con cierto apuro y sin pensar demasiado, argumento que de hecho demuestra la solidez de este trabajo: casi seis décadas después y aún suena fresco, desafiante (para la época) y con un cierto vigor que solo una banda hambrienta, con ganas de comerse al mundo, puede aportar. El álbum comenzaría una racha de once trabajos de estudio consecutivos que alcanzarían el primer lugar en los charts ingleses.
El Rock ‘N’ Roll no había sido un género muy bien recibido durante esos años y acarreaba una historia de prohibiciones, rechazos y restricciones por parte de la sociedad que la volvía casi una blasfemia, pero la realidad es que también ofrecía una liberación y una energía por la que toda una generación estaba aclamando.
Los Beatles les dieron eso, se convirtieron en el soundtrack de una generación y lo volvieron popular en el proceso.
La “Beatlemania”
“Todos fueron influenciados por alguien, pero creo que todos fueron influenciados por los Beatles.”
-Alice Cooper.
La “Beatlemania” es un término que se ha usado para describir la fama, el éxito y la algarabía que se formó alrededor de los Beatles en su dominación absoluta de la década de los 60s, pero hay muchas veces que la gente se ha hecho esta pregunta: ¿Cómo lo lograron?
Si ya Please Please Me habían comenzado el frenesí colectivo en el Reino Unido por estos cuatro caballeros, su segundo álbum, publicado tan solo cuatro meses después de su aclamado debut, With The Beatles, llevó al público a un paroxismo sin igual.
Esto se debe a un factor muy importante: fue el primer trabajo de la banda en ser publicado en Estados Unidos y en Canadá, por lo que pasaron a convertirse en un fenómeno mundial. Presentado en tierras americanas como Beatlemania! With the Beatles!, este trabajo contaba con un par de temas con la clásica combinación Lennon-McCartney, el primer tema compuesto por George Harrison en su totalidad y una serie de covers de R&B, que mostraban el abanico de influencias y de flexibilidad musical con las que contaba este grupo.
Este trabajo también marcó otro hito en la historia de la música y para la banda: se convirtió en el segundo álbum en vender más de un millón de copias en Estados Unidos, siendo el soundtrack de la película South Pacific de 1958 el primero; un logro avasallante para un grupo que hace apenas un año eran unos virtuales desconocidos en su propio país.
Ahora, eran los reyes de la montaña y podían hacer lo que quisieran: todas las mujeres los querían, todas las tiendas querían vender sus álbumes y John, Paul, George y Ringo ya se habían convertido, de la mano de Brian Epstein, en el grupo más grande de todo el planeta.
British Invasion
“Primero que nada, soy un baterista… luego soy todo lo demás.”
-Ringo Starr.
Si bien es cierto que una vez que los Beatles comenzaron a tener una éxito avasallante desde el primero momento en que publicaron sus álbumes en Estados Unidos, la realidad es que el continente americano se les resistió alrededor de un año, y esto fue algo que de cierta manera “contuvo” un poco el impacto de la banda en ese territorio.


Tras un año negándose a publicar el material de la banda, la subsidiaria estadounidense de EMI, Capitol Records, decidieron comenzar a publicar sus álbumes. Claro, esto no vino sin sus cambios (y es por eso que algunas personas se tienden a confundir cuando se analiza la cronología de los álbumes de los Beatles): su álbum debut, Please Please Me, nunca había sido publicado en Estados Unidos y tuvo que esperar hasta el año entrante bajo el nombre de Introducing… The Beatles!
Mientras surgían problemáticas para la publicación de esta versión de su álbum debut, Epstein demostraba sus capacidades como manager al organizar una campaña de marketing a través del suelo norteamericano con una inversión que rondaría los 40.000$, una suma notable para esos años.
Poco a poco, las estaciones de radio, una herramienta vital en los 60s si querías triunfar con tu banda, comenzaron a compartir los singles y así Estados Unidos empezó a adentrarse en un frenesí colectivo, tal como el que se estaba llevando a cabo en el Reino Unido y en el resto de Europa.
“Estados Unidos, los Beatles. Los Beatles, Estados Unidos.”
“El impacto de los Beatles, no solo en el Rock ‘N’ Roll, pero en toda la cultura occidental, es simplemente incalculable.”
-La revista Rolling Stone.
Si hubo un momento clave que asentó a los Beatles como el grupo indiscutible y absoluto en el planeta Tierra, éste fue su primer concierto en Estados Unidos. Ya habían demostrado todo lo que tenían que demostrar como banda en el Reino Unido; el resto fue solamente para continuar el éxito y retarse.
Pero el 7 de febrero de 1964 partieron a Estados Unidos para un concierto en el Washington Coliseum, con más de tres mil aficionados enloquecidos recibiéndolos en el Aeropuerto J.F.K.
Su primera actuación en vivo televisada en Estados Unidos en el programa de Ed Sullivan fue vista por más de 73 millones de espectadores, siendo un 34% de la población del país. Millones de jóvenes fueron expuestos a los Beatles y millones de padres a estos “chicos sin causa”. ¿Cuántas vidas no fueron cambiadas en ese día? ¿Cuántos músicos memorables no empezaron ese sendero a través de ver a esos cuatro británicos en el show de Ed Sullivan?
Esos son detalles que no se pueden cuantificar ni medir, pero sí se pueden palpar: sí se puede saber que los Beatles tomaron el mundo de la música por el cuello y revolucionaron nuestros gustos musicales hasta el punto en que nada volvió a ser igual.
Y damos gracias por ello.